Encontrados 52 resultados para: siguió

  • Siguió en todo los pasos de su padre, sirvió a los ídolos a los que había servido su padre y se postró ante ellos. (2 Reyes 21, 21)

  • El hizo en todo lo que es recto a los ojos de Yavé, y siguió las huellas de David, su padre, sin desviarse para ningún lado. (2 Reyes 22, 2)

  • Reinó tres años en Jerusalén. Su madre era Micaya, hija de Uriel, de Guibea. Siguió la guerra entre Abías y Jeroboam. (2 Crónicas 13, 2)

  • Siguió en todo el camino de su padre Asá, sin desviarse de él, haciendo lo que era correcto a los ojos de Yavé. (2 Crónicas 20, 32)

  • También él siguió los caminos de la familia de Ajab, pues su madre le aconsejaba mal. (2 Crónicas 22, 3)

  • sino que siguió los senderos de los reyes de Israel e incluso fundió ídolos de los baales. (2 Crónicas 28, 2)

  • Mardoqueo vivía en el palacio con dos guardias del rey. Como entrase en sospechas de que algo tramaban, les siguió la pista y descubrió que pensaban asesinar al rey. (Ester 12, 1)

  • Judas atravesó primero hacia el enemigo, y toda su gente lo siguió. Derrotaron a todos los paganos, que abandonaron sus armas y corrieron a buscar refugio en el recinto sagrado de Carnaím. (1 Macabeos 5, 43)

  • Jonatán los siguió sin poder alcanzarlos, porque ya habían pasado el río Eleutero. (1 Macabeos 12, 30)

  • Le ordenó acampar frente a Judea, reconstruir Cedrón, consolidar sus puertas y guerrear contra el pueblo. El rey por su parte siguió persiguiendo a Trifón. (1 Macabeos 15, 39)

  • Josué siguió siempre al Todopoderoso. En tiempos de Moisés, junto con Caleb, hijo de Jefuné, actuó bien oponiéndose a la multitud, trató de apartar al pueblo del pecado y de hacer callar las murmuraciones de los malvados. (Sirácides (Eclesiástico) 46, 7)

  • Por esto Yavé se enojó con su pueblo y levantó su mano para pegarle; los cerros se estremecieron y los cadáveres quedaron tirados esparcidos como la basura en las calles. Pero no se le pasó el enojo, pues siguió con su mano levantada. (Isaías 5, 25)


“Lembre-se de que os santos foram sempre criticados pelas pessoas deste mundo, e puseram sob seus pés o mundo e as suas máximas .” São Padre Pio de Pietrelcina