Encontrados 27 resultados para: servido

  • El me contestó: «Yavé, al que he servido siempre, mandará a su Angel para que te acompañe, y resulte tu viaje. Tomarás una mujer para mi hijo de entre mi parentela y de la casa de mi padre. (Génesis 24, 40)

  • A la mañana siguiente: ¡Caramba! ¡Lía! Jacob dijo a Labán: «¿Qué me has hecho? Yo te he servido por Raquel. (Génesis 29, 25)

  • Dame mis esposas y mis hijos, por quienes te he servido, y déjame partir, pues bien sabes con qué fidelidad te he servido.» (Génesis 30, 26)

  • Jacob respondió: «Tú sabes cómo te he servido, y cómo le fue a tu rebaño conmigo. (Génesis 30, 29)

  • Ustedes saben muy bien que he servido a su padre con todas mis fuerzas, (Génesis 31, 6)

  • Por no haber servido con gozo y alegría de corazón a Yavé, tu Dios, cuando nada te faltaba, (Deuteronomio 28, 47)

  • A pesar de esto me han abandonado y han servido a otros dioses. Por eso no los salvaré otra vez. (Jueces 10, 13)

  • Por lo demás, ¿a quién voy a servir?, ¿no eres tú el hijo de David? Como he servido a tu padre, así te serviré.» (2 Samuel 16, 19)

  • Y les responderán: «Porque abandonaron a Yavé, su Dios, que sacó a sus padres del país de Egipto, y han seguido a otros dioses, los han servido y adorado, por eso Yavé ha hecho caer todo este mal sobre ellos.» (1 Reyes 9, 9)

  • quité este reino a los hijos de David para dártelo, pero tú no has imitado a mi siervo David. El ha cumplido mis mandamientos y me ha servido con todo su corazón, haciendo lo que me agrada, (1 Reyes 14, 8)

  • «Ah, Yavé, dígnate recordar que yo te he servido con fidelidad y corazón bueno, haciendo lo que te agrada.» Y Ezequías lloró con abundantes lágrimas. (2 Reyes 20, 3)

  • Siguió en todo los pasos de su padre, sirvió a los ídolos a los que había servido su padre y se postró ante ellos. (2 Reyes 21, 21)


“Se você não entrega seu coração a Deus, o que lhe entrega?” “Você deve seguir outra estrada. Tire de seu coração todas as paixões deste mundo, humilhe-se na poeira e reze! Dessa forma, certamente você encontrará Deus, que lhe dará paz e serenidade nesta vida e a eterna beatitude na próxima.” São Padre Pio de Pietrelcina