Encontrados 455 resultados para: serán

  • Pero si no expulsan delante de ustedes a los habitantes del país, los que queden serán para ustedes como espinas en los ojos y aguijones en los costados. A ustedes los hostigarán en el país en que van a vivir, y yo los trataré a ustedes en la forma en que pensaba tratarlos a ellos. (Números 33, 55)

  • seguirá después hasta Zeprona y se terminará en la aldea de Enan. Estos serán los límites al norte. (Números 34, 9)

  • éstos serán: por la tribu de Judá, Caleb, hijo de Jefoné; (Números 34, 19)

  • Los levitas vivirán en esas ciudades y sus pastos serán para todos sus animales y sus pertenencias. (Números 35, 3)

  • Estos pastos formarán un cuadrado de mil metros: mil metros al occidente, mil al sur, mil al oeste y mil metros al norte; la ciudad estará al centro. Estos serán los pastos propios de las ciudades de los levitas. (Números 35, 5)

  • Estas serán normas de derecho para ustedes y para sus descendientes, dondequiera que vivan. (Números 35, 29)

  • Pues si lo irritan, desaparecerán de la tierra que va a ser de ustedes, al pasar el Jordán; el cielo y la tierra son testigos de mis advertencias: ustedes serán reducidos a nada. (Deuteronomio 4, 26)

  • Cuiden de cumplir con todos los mandamientos que hoy les ordeno. Si lo hacen, vivirán y se multiplicarán y serán dueños de la tierra que prometió Yavé con juramento a sus padres. (Deuteronomio 8, 1)

  • Todo lugar donde pongan el pie será de ustedes, desde el desierto hasta el Líbano y desde el río Eufrates hasta el mar occidental: éstas serán sus fronteras. (Deuteronomio 11, 24)

  • pero las mujeres y niños, el ganado y las demás cosas que en ella encuentres, serán tu botín y comerás de los despojos de tus enemigos que Yavé te haya entregado. (Deuteronomio 20, 14)

  • Tu buey será sacrificado delante de ti y no comerás de él. Ante tus ojos te robarán tu burro y no te lo devolverán, tus ovejas serán entregadas a tus enemigos y nadie te defenderá. (Deuteronomio 28, 31)

  • Tus hijos y tus hijas serán entregados a pueblos extranjeros y enfermerás con tanto mirar hacia ellos, pero no podrás hacer nada. (Deuteronomio 28, 32)


Como distinguir uma tentação de um pecado e como estar certo de que não se pecou? – perguntou um penitente. Padre Pio sorriu e respondeu: “Como se distingue um burro de um homem? O burro tem de ser conduzido; o homem conduz a si mesmo!” São Padre Pio de Pietrelcina