Encontrados 488 resultados para: según

  • Y han oído decir que enseñas a todos los judíos del mundo pagano que se aparten de Moisés, que no circunciden a sus hijos ni vivan según las tradiciones judías. (Hecho de los Apóstoles 21, 21)

  • Pablo entonces le dijo: «Dios te golpeará a ti, pared blanqueada. Estás ahí sentado para juzgarme según la Ley, y tú violas la Ley ordenando que me golpeen.» (Hecho de los Apóstoles 23, 3)

  • Incluso intentaba profanar el Templo cuando lo tomamos preso. Queríamos juzgarlo según nuestra Ley, (Hecho de los Apóstoles 24, 6)

  • Pero sí admito ante ti que sirvo al Dios de nuestros padres según nuestro camino, que ellos llaman secta. Creo en todo lo que está escrito en la Ley y los Profetas (Hecho de los Apóstoles 24, 14)

  • Y esta es la razón por la que me encontraron en el Templo. Me había purificado según la Ley, y no había aglomeración de gente ni tumulto. (Hecho de los Apóstoles 24, 18)

  • se refiere a su Hijoque nació de la descendencia de David según la carne, (Carta a los Romanos 1, 3)

  • conoces su voluntad porque la Ley te la enseñó, y sabes cómo actuar según las circunstancias.; (Carta a los Romanos 2, 18)

  • Mediante la fe según Jesucristo Dios reordena y hace justos a todos los que llegan a la fe. No hay distinción de personas, (Carta a los Romanos 3, 22)

  • Hablemos, pues, de Abrahán, nuestro padre según la carne. ¿Qué fue lo novedoso en él? (Carta a los Romanos 4, 1)

  • Por eso la fe es el camino, y todo es don. De este modo la promesa de Abrahán queda asegurada para toda su raza, no sólo para sus hijos según la Ley, sino también para aquellos que por la fe son hijos suyos. (Carta a los Romanos 4, 16)

  • Abrahán creyó y esperó contra toda esperanza, llegando a ser padre de muchas naciones, según le habían dicho: ¡Mira cuán numerosos serán tus descendientes! (Carta a los Romanos 4, 18)

  • Los que viven según la carne van a lo que es de la carne, y los que viven según el Espíritu van a las cosas del espíritu. (Carta a los Romanos 8, 5)


“É doce o viver e o penar para trazer benefícios aos irmãos e para tantas almas que, vertiginosamente, desejam se justificar no mal, a despeito do Bem Supremo.” São Padre Pio de Pietrelcina