Encontrados 254 resultados para: pecados sexuales

  • Trajeron siete novillos, siete carneros, siete corderos, siete machos cabríos que se sacrificaron por los pecados del reino, del santuario y de todo el país de Judá; y mandó a los sacerdotes hijos de Aarón que ofrecieran holocaustos sobre el altar de Yavé. (2 Crónicas 29, 21)

  • Asimismo su oración, y cómo fue escuchada, y todos sus pecados y apostasía: los sitios en que edificó santuarios altos y levantó troncos sagrados e ídolos antes de hacer penitencia, están escritos en los Hechos de Josay. (2 Crónicas 33, 19)

  • Pero no se humilló delante de Yavé como lo había hecho su padre Manasés. Al contrario, Amón cometió aún más pecados. (2 Crónicas 33, 23)

  • Dije: «Dios mío, tengo vergüenza y confusión. Dios mío, no me atrevo a levantar a ti mis ojos, porque nuestros pecados se han multiplicado por encima de nuestra cabeza y nuestros crímenes han crecido hasta el cielo. (Esdras 9, 6)

  • Yavé, Dios de Israel, tú eres justo; mira que somos un resto de sobrevivientes. Estamos aquí en tu presencia llevando nuestros pecados, pero no podemos permanecer así en tu presencia. (Esdras 9, 15)

  • Te estoy confesando los pecados que los hijos de Israel hemos cometido contra ti. Yo mismo, y la familia de mi padre, hemos pecado. Nos hemos portado muy mal. No cumplimos tus mandamientos, leyes e instrucciones, que entregaste a tu siervo Moisés. (Nehemías 1, 7)

  • La raza de Israel se separó de todos los extranjeros y, puestos de pie, confesaron sus pecados y los de sus padres. (Nehemías 9, 2)

  • Se pusieron de pie permaneciendo en su lugar, y se leyó en el libro de la Ley de Yavé, su Dios, por espacio de tres horas; durante otras tres horas confesaron sus pecados y quedaron postrados ante Yavé, su Dios. (Nehemías 9, 3)

  • Pero después, indóciles, se rebelaron contra ti, se echaron tu Ley a la espalda, mataron a los profetas que los invitaban a volver a ti, y cometieron contra ti grandes pecados. (Nehemías 9, 26)

  • Mientras vivían en su reino, gozando de la prosperidad que venía de ti, y la muy fértil y espaciosa tierra que tú les habías preparado, no te sirvieron ni se arrepintieron de sus pecados. (Nehemías 9, 35)

  • Los abundantes frutos que da el país son para los reyes que tú nos has impuesto por nuestros pecados; ellos hacen lo que quieren de nuestras personas y de nuestros ganados, con lo que vivimos en gran tribulación.» (Nehemías 9, 37)

  • Y ahora, Señor, acuérdate de mí y mírame. Perdona mis pecados, así como el mal que hice por ignorancia. Perdona los pecados de mis padres que pecaron ante ti, (Tobías 3, 3)


“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina