Encontrados 371 resultados para: medidas del templo

  • pero Dios tendrá una vez más compasión de ellos, volverán a su país y edificarán el Templo, aunque no como el primero, hasta que se cumpla el tiempo. Entonces volverán todos del destierro, construirán una Jerusalén maravillosa y en ella la Casa de Dios, como lo anunciaron los profetas de Israel. (Tobías 14, 5)

  • tuvieron miedo y temblaban pensando en la suerte de Jerusalén y su Templo, (Judit 4, 2)

  • ya que hacía poco que habían vuelto del destierro; el pueblo de Judea acababa de reunirse y de consagrar de nuevo el Templo con su altar y su mobiliario después de ser profanado. (Judit 4, 3)

  • Los habitantes de Jerusalén, con sus esposas y sus niños, se arrodillaron ante el Templo, cubrieron de ceniza sus cabezas y extendieron las manos para rezar ante el Señor. (Judit 4, 11)

  • Cubrieron el altar de saco, y todos a una voz pidieron al Dios de Israel que no permitiera arrebatar a sus hijos y esposas, destruir sus ciudades y profanar su Templo. (Judit 4, 12)

  • El Señor oyó su voz y comprendió su angustia. El pueblo ayunó muchos días en Judá y Jerusalén ante el Templo del Señor Omnipotente. (Judit 4, 13)

  • Pero cuando se apartaron del camino que les había trazado, fueron exterminados en numerosos desastres y desterrados a otros países; el Templo de su Dios fue arrasado y sus ciudades tomadas por los enemigos. (Judit 5, 18)

  • Ahora, pues, mostremos a nuestros hermanos que nos sentimos solidarios con ellos y que sabemos luchar por nuestra religión, nuestro Templo y su altar. (Judit 8, 24)

  • Judit ofreció para el Templo todo el mobiliario de Holofernes, que el pueblo le había entregado, así como las cortinas de su dormitorio que ella misma se había llevado. (Judit 16, 19)

  • Ester fue, por segunda vez, a hablar con el rey para suplicarle que dejase sin efecto las medidas adoptadas por Amán en contra de los judíos. Postrada a sus pies, lloraba y le rogaba para que no se cumplieran sus malas intenciones. (Ester 8, 3)

  • Pero yo por tu inmensa bondad puedo entrar en tu casa; frente a tu santo templo me prosterno con toda reverencia. (Salmos 5, 8)

  • El Señor está en su templo santo, el Señor tiene su trono en el cielo. Sus ojos están observando y fija su mirada en los hijos de Adán. (Salmos 11, 4)


“Quando fizer o bem, esqueça. Se fizer o mal, pense no que fez e se arrependa.” São Padre Pio de Pietrelcina