Encontrados 669 resultados para: manos

  • Entregará sus reyes en tus manos para que borres sus nombres de debajo del cielo; nadie podrá resistir ante ti hasta que los hayas destruido. (Deuteronomio 7, 24)

  • Bajé, pues, de la cumbre ardiente, teniendo en mis manos las dos tablas de la Alianza, (Deuteronomio 9, 15)

  • Arrojé, entonces, con ambas manos las tablas que llevaba y las hice pedazos a la vista de todos. (Deuteronomio 9, 17)

  • entonces llevarán al lugar elegido por Yavé para morada de su Nombre, todo lo que yo les prescribo: las víctimas consumidas por el fuego, los sacrificios, los diezmos y las primicias del trabajo de sus manos, y lo que hayan prometido por voto a Yavé, pues querrás ofrecerle lo mejor. (Deuteronomio 12, 11)

  • Vendrá entonces a comer el levita, que no tiene herencia propia entre ustedes, y el extranjero, el huérfano y la viuda, que habitan tus ciudades, y comerán hasta saciarse. Así Yavé bendecirá todas las obras de tus manos, todo lo que hayas emprendido. (Deuteronomio 14, 29)

  • Al dejarlo libre, no lo despedirás con las manos vacías, (Deuteronomio 15, 13)

  • Siete días durará esta fiesta en honor a Yavé, en el lugar elegido por él; pues Yavé te bendecirá en todas tus cosechas y en toda obra de tus manos, así que te darás todo a la alegría. (Deuteronomio 16, 15)

  • Tres veces al año se presentarán todos tus varones ante Yavé, tu Dios, en el lugar elegido por él: en la fiesta de los Azimos, en la fiesta de las Semanas y en la fiesta de los Tabernáculos. Y no se presentarán con las manos vacías, (Deuteronomio 16, 16)

  • los jefes de su ciudad mandarán prenderlo allí, al lugar de asilo, y lo entregarán en manos del pariente del muerto para que le quiten la vida. (Deuteronomio 19, 12)

  • Y cuando Yavé, tu Dios, la entregue en tus manos pasarás a cuchillo a todos los varones, (Deuteronomio 20, 13)

  • Entonces todos los ancianos del pueblo más próximo al crimen se lavarán las manos en el arroyo sobre la ternera desnucada, (Deuteronomio 21, 6)

  • y pronunciarán estas palabras: «Nuestras manos no han derramado esa sangre y nuestros ojos no han visto nada. (Deuteronomio 21, 7)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina