Encontrados 29 resultados para: madrugada

  • Llegó la mujer de madrugada y cayó a la entrada de la casa del hombre donde estaba su marido; allí quedó hasta que fue de día. (Jueces 19, 26)

  • Al día siguiente el pueblo se levantó de madrugada, construyó allí un altar y ofreció holocaustos y sacrificios de comunión. (Jueces 21, 4)

  • Se levantó de madrugada y fue en busca de Saúl. Le avisaron que Saúl había ido a Carmelo, donde se erigió un monumento; luego, siguiendo su camino, había bajado a Guilgal. (1 Samuel 15, 12)

  • Se levantó David de madrugada, dejó su rebaño encargado a un pastor y, tomando las cosas, se fue como le había mandado su padre. Y llegó al campamento justo cuando el ejército salía para ponerse en posición de ataque lanzando el grito de guerra. (1 Samuel 17, 20)

  • De madrugada partieron juntos a la boda. Al entrar en la casa de Ragüel, encontraron a Tobías sentado a la mesa; se Tobantó y abrazó a Gabael, que se echó a llorar y le bendijo así: «¡Hombre bueno y honrado, hijo de un hombre honrado y bueno, justo y limosnero! Que el Señor te conceda las bendiciones del ciclo a ti, a tu mujer, al padre y a la madre de tu mujer. ¡Bendito sea Dios, que me ha permitido ver un vivo retrato de mi primo Tobit.» (Tobías 9, 6)

  • De madrugada se levanta el asesino para matar al pobre indigente. (Job 24, 14)

  • El día veinticinco del mes noveno, llamado mes de Casleu, del año ciento cuarenta y ocho, se levantaron de madrugada (1 Macabeos 4, 52)

  • Este se levantó de madrugada e hizo avanzar su ejército muy envalentonado por el camino de Bet Zacarías. Las tropas se dispusieron para entrar en batalla y se tocaron las trompetas. (1 Macabeos 6, 33)

  • Entre tanto, Jonatán acampó con su ejército junto a las aguas de Genesaret y, muy de madrugada, llegaron a la llanura de Asor. (1 Macabeos 11, 67)

  • El mundo entero está delante de ti como un grano en la balanza, como una gota de rocío que cayó al suelo de madrugada. (Sabiduría 11, 22)

  • Después se llevó prisioneros a toda la pequeña población que había en Mispá, y a las princesas reales que Nebuzardán, comandante de la guardia, había entregado al cuidado de Godolías, hijo de Ajigam. Y, de madrugada, se puso en marcha hacia el país de los amonitas. (Jeremías 41, 10)

  • Aprendan algo del Reino de los Cielos. Un propietario salió de madrugada a contratar trabajadores para su viña. (Evangelio según San Mateo 20, 1)


“Seja paciente e espere com confiança o tempo do Senhor”. São Padre Pio de Pietrelcina