Encontrados 80 resultados para: haces

  • Haces brotar vertientes en las quebradas, que corren por en medio de los montes, (Salmos 104, 10)

  • haces brotar el pasto para el ganado y las plantas que el hombre ha de cultivar, para que de la tierra saque el pan (Salmos 104, 14)

  • Jamás olvidaré tus ordenanzas pues por ellas me haces revivir. (Salmos 119, 93)

  • Me haces más sabio que mis enemigos por tu mandamiento que es siempre mío. (Salmos 119, 98)

  • Pero él, fijando los ojos en el rey, le decía: «Aunque mortal, tienes la autoridad sobre los hombres y haces lo que quieres. Sin embargo, no pienses que nuestra raza esté abandonada por Dios. (2 Macabeos 7, 16)

  • El rey hablará, ¡y punto! Nadie le dirá "¿Qué haces?" (Eclesiastés (Qohelet) 8, 4)

  • Así es como corriges de a poco a los que pecan. Les haces ver, mediante tus correcciones, en qué han pecado, para que renuncien al mal y crean en ti, Señor. (Sabiduría 12, 2)

  • Puesto que tú eres perfectamente justo, lo haces todo con justicia: harías un mal uso de tu poder si condenaras al que no merece ser castigado. (Sabiduría 12, 15)

  • De tal manera que cuando castigas a nuestros enemigos con moderación, lo haces para que aprendamos, para que pensemos en tu bondad cuando nos toque ser jueces, y para que confíemos en tu misericordia cuando seamos juzgados. (Sabiduría 12, 22)

  • Sí, tú tienes poder sobre la vida y la muerte; tú haces que bajen los hombres a la morada subterránea o tú los preservas de ella. (Sabiduría 16, 13)

  • No te jactes cuando no haces más que cumplir con tus obligaciones, ni te pongas soberbio cuando estés en apreturas. (Sirácides (Eclesiástico) 10, 26)

  • Si haces un favor, mira a quién lo haces, y te valdrá un reconocimiento. (Sirácides (Eclesiástico) 12, 1)


“Por que a tentação passada deixa na alma uma certa perturbação? perguntou um penitente a Padre Pio. Ele respondeu: “Você já presenciou um tremor de terra? Quando tudo estremece a sua volta, você também é sacudido; no entanto, não necessariamente fica enterrado nos destroços!” São Padre Pio de Pietrelcina