Encontrados 102 resultados para: dirigió
David dirigió a Yavé las palabras de este cántico cuando éste lo libró de Saúl y de todos sus enemigos. Dijo: (2 Samuel 22, 1)
Pero Yavé dirigió esta palabra a Semeías, hombre de Dios: (1 Reyes 12, 22)
Entonces Elías se dirigió a todo el pueblo: «¿Hasta cuándo van a danzar de un pie en el otro? Si Yavé es Dios, síganlo; si lo es Baal, síganlo a él.» El pueblo quedó callado. (1 Reyes 18, 21)
Allí se dirigió hacia la cueva y pasó la noche en aquel lugar. Y le llegó una palabra de Yavé: «¿Qué haces aquí, Elías?» (1 Reyes 19, 9)
Volvió el rey a enviarle un tercer jefe con cincuenta hombres. Este, al llegar, cayó de rodillas ante Elías y le dirigió estas palabras: «Hombre de Dios, te ruego que me perdones, así como a mis cincuenta hombres; todos somos siervos tuyos. (2 Reyes 1, 13)
Los arameos bajaron hacia él y nuevamente Eliseo dirigió esta súplica a Yavé: «Haz que no vean.» Yavé, pues, hizo que ya no vieran lo que estaban mirando, según se lo había pedido. (2 Reyes 6, 18)
En aquel entonces, Jazael, rey de Aram, vino para combatir contra Gat, la tomó y se dirigió contra Jerusalén. (2 Reyes 12, 18)
Le dirigió esta súplica: «Yavé, Dios de Israel, que estás sentado sobre los querubines, tú eres el único Dios de todos los reinos de la tierra; tú eres el creador de los cielos y de la tierra. Atiéndeme, Yavé, y escucha. (2 Reyes 19, 15)
Hiram, rey de Tiro, respondió en una carta que dirigió a Salomón: «Porque ama Yavé a su pueblo, te ha hecho rey de él.» (2 Crónicas 2, 10)
Cuando Yavé vio que se habían humillado, dirigió nuevamente su palabra a Semaías: «Ustedes se han humillado y por esta razón no los destruiré, sino que dentro de poco les daré la salvación y no derramaré mi cólera sobre Jerusalén por mano de Sosaq. (2 Crónicas 12, 7)
Judit se arrodilló con el rostro inclinado, puso ceniza sobre su cabeza y dejó ver el saco que tenía puesto. Era precisamente a la misma hora en que se ofrecía en la Casa de Dios de Jerusalén el incienso de la tarde. Y dirigió su voz al Señor, diciendo: (Judit 9, 1)
Yavé, después de hablarle así a Job, se dirigió a Elifaz de Temán: «Me siento muy enojado contra ti y contra tus dos amigos, porque no hablaron bien de mí, como lo hizo mi servidor Job. (Job 42, 7)