Encontrados 80 resultados para: dejado

  • Los he pasado por el harnero en las ciudades del país. He dejado sin hijos a mi pueblo para que desaparezca, porque no ha querido dejar el mal camino. (Jeremías 15, 7)

  • Sus viudas son más numerosas que las arenas del mar. He dejado caer al salteador, en pleno día, sobre las madres de los jóvenes guerreros; de repente, se han apoderado de ellas el miedo y el terror. (Jeremías 15, 8)

  • El león ha dejado su guarida, y la tierra se ha convertido en un desierto, bajo los golpes de la espada destructora. (Jeremías 25, 38)

  • ¿No te has fijado en lo que esta gente comenta? Que Yavé ha dejado a un lado a las dos familias que había escogido, y, por eso, desprecian a mi pueblo, que para ellos ya no es una nación. (Jeremías 33, 24)

  • Todos los jefes de las guerrillas, que se mantenían con sus hombres en pie de guerra, se enteraron de que el rey de Babilonia había dejado a Godolías, hijo de Ajigam, como gobernador del país y que le había encomendado hombres, mujeres y niños, así como la gente común del país que no había sido desterrada a Babilonia. (Jeremías 40, 7)

  • Igualmente, los judíos que estaban en Moab, entre los amonitas, en Edom y en todos los otros países, supieron que el rey de Babilonia había dejado una parte de la población de Judá y que había puesto al frente de ellos a Godolías, hijo de Ajigam, nieto de Safán. (Jeremías 40, 11)

  • Entre ellos había hombres, mujeres y niños; estaban las princesas reales y todas las personas que Nebuzardán, comandante de la guardia, había dejado con Godolías, hijo de Ajigam, y nieto de Safán, y, especialmente, el profeta Jeremías y Baruc, hijo de Nerías. (Jeremías 43, 6)

  • El Señor ha rechazado su altar, ha despreciado su santuario; ha dejado a merced del enemigo los muros de sus palacios; en la Casa de Yavé se oyeron gritos como en día de fiesta. (Lamentaciones 2, 7)

  • Yavé me dijo: «Vuelve a querer de nuevo a una mujer adúltera que hace el amor con otros, así como Yavé ama a los hijos de Israel a pesar de que lo han dejado por otros dioses y les ofrecen tortas de pasas.» (Oseas 3, 1)

  • Mi pueblo languidece por falta de conocimiento, y como tú has dejado que se perdiera el conocimiento, yo también haré que pierdas mi sacerdocio. Te has olvidado de mi Ley, y también yo me olvidaré de tus hijos. (Oseas 4, 6)

  • Todos por igual me han ofendido, pues me han dejado a mí, su Gloria, por ir a unas vergüenzas. (Oseas 4, 7)

  • Todos están ardiendo de pasión, calientes como un horno que ha dejado encendido el panadero mientras amasa y espera que la masa se levante. (Oseas 7, 4)


“A caridade é o metro com o qual o Senhor nos julgará.” São Padre Pio de Pietrelcina