Encontrados 614 resultados para: cuerpo de Cristo

  • Jacob fue padre de José, esposo de María, de la que nació Jesús, llamado Cristo. (Evangelio según San Mateo 1, 16)

  • De modo que fueron catorce las generaciones desde Abrahán a David; otras catorce desde David hasta la deportación a Babilonia, y catorce más desde esta deportación hasta el nacimiento de Cristo. (Evangelio según San Mateo 1, 17)

  • Por eso, si tu ojo derecho te está haciendo caer, sácatelo y tíralo lejos; porque más te conviene perder una parte de tu cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno. (Evangelio según San Mateo 5, 29)

  • Y si tu mano derecha te lleva al pecado, córtala y aléjala de ti; porque es mejor que pierdas una parte de tu cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno. (Evangelio según San Mateo 5, 30)

  • Tu ojo es la lámpara de tu cuerpo. Si tus ojos están sanos, todo tu cuerpo tendrá luz; pero si tus ojos están malos, todo tu cuerpo estará en obscuridad. (Evangelio según San Mateo 6, 22)

  • Por eso yo les digo: No anden preocupados por su vida con problemas de alimentos, ni por su cuerpo con problemas de ropa. ¿No es más importante la vida que el alimento y más valioso el cuerpo que la ropa? (Evangelio según San Mateo 6, 25)

  • No teman a los que sólo pueden matar el cuerpo, pero no el alma; teman más bien al que puede destruir alma y cuerpo en el infierno. (Evangelio según San Mateo 10, 28)

  • Juan, que estaba en la cárcel, oyó hablar de las obras de Cristo, por lo que envió a sus discípulos (Evangelio según San Mateo 11, 2)

  • Después vinieron los discípulos de Juan a recoger su cuerpo y lo enterraron. Y fueron a dar la noticia a Jesús. (Evangelio según San Mateo 14, 12)

  • Tampoco se dejen ustedes llamar Guía, porque ustedes no tienen más Guía que Cristo. (Evangelio según San Mateo 23, 10)

  • Al derramar este perfume sobre mi cuerpo, ella preparaba mi entierro. (Evangelio según San Mateo 26, 12)

  • Mientras comían, Jesús tomó pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: «Tomen y coman; esto es mi cuerpo.» (Evangelio según San Mateo 26, 26)


“De que vale perder-se em vãos temores?” São Padre Pio de Pietrelcina