Encontrados 388 resultados para: cuatro animales

  • Midió en seguida el muro de la Casa; tenía seis codos de alto; el ancho del corredor que rodeaba a la Casa era de cuatro codos. (Ezequiel 41, 5)

  • Así midió los cuatro lados; un muro de quinientas varas a lo largo y a lo ancho separaba lo sagrado de lo profano. (Ezequiel 42, 20)

  • el zócalo inferior tiene dos codos por encima del basamento, dejando un codo de ancho, y la altura es de cuatro codos desde el pequeño zócalo hasta el gran zócalo, dejando también un codo de ancho. (Ezequiel 43, 14)

  • El fogón está cuatro codos más alto, con sus cuatro cuernos hacia arriba. (Ezequiel 43, 15)

  • Untarás en su sangre y con ella tocarás los cuatro cuernos, los ángulos del zócalo y el borde; así harás la expiación del altar. (Ezequiel 43, 20)

  • En mi santuario serán los encargados de la vigilancia de las puertas del Templo y mantendrán el servicio de la Casa. Degollarán los animales para el holocausto y el sacrificio por el pueblo, estarán a disposición del pueblo para el culto. (Ezequiel 44, 11)

  • El sacerdote untará en la sangre de la víctima por el pecado y rociará los montantes de la puerta de la Casa, los cuatro ángulos del zócalo del altar y los montantes de las puertas del patio interior. (Ezequiel 45, 19)

  • Me llevó en seguida al patio exterior e hizo que pasara cerca de las cuatro esquinas del patio. En cada esquina había un pequeño patio, (Ezequiel 46, 21)

  • o sea cuatro patios pequeños de cuarenta codos de largo por treinta de ancho; los cuatro tenían las mismas dimensiones. (Ezequiel 46, 22)

  • La superficie que resta, de cinco mil codos de ancho por veinticinco mil de largo, será un territorio profano para la ciudad, para viviendas y para que pasten los animales; la ciudad quedará en el medio. (Ezequiel 48, 15)

  • Estas son sus dimensiones: cuatro mil quinientos codos al norte, al sur, al este y al oeste. (Ezequiel 48, 16)

  • Estas son las salidas de la ciudad: El lado norte tendrá cuatro mil quinientos codos. (Ezequiel 48, 30)


“Agradeça sempre ao Pai eterno por sua infinita misericórdia”. São Padre Pio de Pietrelcina