Encontrados 452 resultados para: cruz de Cristo

  • y le dice: "Recorre Jerusalén, marca con una cruz en la frente a los hombres que se lamentan y que gimen por todas esas prácticas escandalosas que se realizan en esta ciudad". (Ezequiel 9, 4)

  • Viejos, jóvenes, muchachas, niños y mujeres, mátenlos hasta acabar con ellos. Pero no tocarán a los que tienen la cruz. Comenzarán por mi Santuario". Comienzan pues con la gente que se encontraba delante del Templo. (Ezequiel 9, 6)

  • Jacob fue padre de José, esposo de María, de la que nació Jesús, llamado Cristo. (Evangelio según San Mateo 1, 16)

  • De modo que fueron catorce las generaciones desde Abrahán a David; otras catorce desde David hasta la deportación a Babilonia, y catorce más desde esta deportación hasta el nacimiento de Cristo. (Evangelio según San Mateo 1, 17)

  • El que no carga con su cruz y viene detrás de mí, no es digno de mí. (Evangelio según San Mateo 10, 38)

  • Juan, que estaba en la cárcel, oyó hablar de las obras de Cristo, por lo que envió a sus discípulos (Evangelio según San Mateo 11, 2)

  • Entonces dijo Jesús a sus discípulos: «El que quiera seguirme, que renuncie a sí mismo, cargue con su cruz y me siga. (Evangelio según San Mateo 16, 24)

  • Tampoco se dejen ustedes llamar Guía, porque ustedes no tienen más Guía que Cristo. (Evangelio según San Mateo 23, 10)

  • Cuando se juntó toda la gente, Pilato les dijo: «¿A quién quieren que deje libre, a Barrabás o a Jesús, llamado el Cristo?» (Evangelio según San Mateo 27, 17)

  • Pilato les dijo: «¿Y qué hago con Jesús, llamado el Cristo?» Todos contestaron: «¡Crucifícalo!» (Evangelio según San Mateo 27, 22)

  • Por el camino se encontraron con un hombre de Cirene, llamado Simón, y le obligaron a que cargara con la cruz de Jesús. (Evangelio según San Mateo 27, 32)

  • y decían: «¡Vaya! ¡Tú que destruyes el Templo y lo levantas de nuevo en tres días! Si eres el Hijo de Dios, líbrate del suplicio y baja de la cruz.» (Evangelio según San Mateo 27, 40)


“A meditação não é um meio para chegar a Deus, mas um fim. A finalidade da meditação é o amor a Deus e ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina