Encontrados 343 resultados para: campo de batalla

  • Las aguas lo habían hecho crecer, las aguas subterráneas le habían dado su prestancia, y de donde él estaba regaba a todos los árboles del campo por medio de canales. (Ezequiel 31, 4)

  • Era el más alto de los árboles del campo, sus ramas se habían multiplicado, su ramaje cubría todo su derredor gracias a la abundancia de las aguas. (Ezequiel 31, 5)

  • Esto dice Yavé: Dispuse un gran duelo para el día en que el cedro bajó a la morada de los muertos; cerré el abismo encima de él, detuve los ríos y sus aguas se secaron. Por él vestí de negro al Líbano, y se secaron todos los árboles del campo. (Ezequiel 31, 15)

  • Añadirás: Esto dice Yavé: Tan cierto como que vivo que los que viven entre ruinas caerán a espada, los que viven en el campo serán devorados por las fieras salvajes y los que viven en guaridas y en cavernas morirán de peste. (Ezequiel 33, 27)

  • Multiplicaré los frutos de los árboles y los productos del campo; ya no serán más humillados por el hambre en presencia de las demás naciones. (Ezequiel 36, 30)

  • Ante mí temblarán los peces del mar, las aves del cielo, los animales del campo, todos los reptiles que se arrastran por el suelo y todos los hombres que están en la tierra. Las montañas se hundirán, los acantilados se derrumbarán y todas las fortificaciones caerán". (Ezequiel 38, 20)

  • No se los verá trayendo leña recogida en el campo, ni irán a buscarla a los bosques, porque harán fuego con las armas; despojarán a los que los despojaron y saquearán a los que los saquearon - palabra de Yavé. (Ezequiel 39, 10)

  • Su ramaje era hermoso y su fruto abundante, había en él comida para todos, a su sombra se protegían los animales del campo, en sus ramas anidaban los pájaros del cielo y todos los seres vivos se alimentaban de él (Daniel 4, 9)

  • Pero dejen en tierra el tronco y las raíces atados con hierro y bronce, entre la hierba del campo; que lo bañe el rocío del cielo, y participe con los animales de la tierra; (Daniel 4, 12)

  • que tenía hermoso ramaje y fruto abundante en el que había alimentos para todos, bajo el cual se refugiaban los animales del campo y en cuyas ramas anidaban las aves del cielo, (Daniel 4, 18)

  • En cuanto a lo que ha visto el rey, un ángel, un santo que bajaba del cielo y decía: «Corten el árbol, destruyéndolo, pero el tronco y las raíces déjenlos en tierra, con ataduras de hierro y bronce, entre la hierba del campo, que lo moje el rocío del cielo y participe de la suerte de los animales del campo hasta que hayan pasado por él siete tiempos, mira que voy a explicártelo (Daniel 4, 20)

  • Serás echado de entre los hombres y vivirás con las bestias del campo; comerás hierba como los bueyes, y te bañará el rocío del cielo; siete tiempos pasarán por ti, hasta que reconozcas que el Altísimo está más arriba que cualquier autoridad humana; él da el poder al que le agrada (Daniel 4, 22)


“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina