Encontrados 378 resultados para: antes

  • Estas son las bendiciones que Moisés dio a los hijos de Israel antes de morir. Dijo: (Deuteronomio 33, 1)

  • Y al anochecer, poco antes de que se cerraran las puertas de la ciudad, se fueron. No sé a dónde se marcharon, pero dense prisa y seguramente los alcanzarán.» (Josué 2, 5)

  • Josué no dio la orden de cesar el combate antes de que todos los habitantes de Hay hubieran sido sacrificados conforme al anatema. (Josué 8, 26)

  • No hubo día igual, ni antes ni después, en que Yavé haya obedecido una orden de un hombre. Es que Yavé peleaba por Israel. (Josué 10, 14)

  • Y avanzando desde allí, subió a los habitantes de Dabir, que antes se llamaba Cariat-Sefer. (Josué 15, 15)

  • Estas ciudades fueron señaladas para todos los hijos de Israel y para los forasteros que habitaban entre ellos, a fin de que sirvieran de asilo al que sin querer hubiese muerto a un hombre. Ese no sería muerto por el pariente de la víctima antes de haber sido juzgado por la comunidad. (Josué 20, 9)

  • Los dejó subsistir para que las generaciones de los hijos de Israel que antes no habían conocido la guerra aprendieran a guerrear. (Jueces 3, 2)

  • Este persiguió a Gaal, que tuvo que huir, y muchos cayeron muertos antes de llegar a la puerta. (Jueces 9, 40)

  • El séptimo día, antes de que entrara al departamento de los esposos, la gente de la ciudad dijo a Sansón: «¿Qué hay más dulce que la miel y qué más fuerte que el león?» El les respondió: «Si no hubieran arado con mi novilla, no habrían acertado mi adivinanza.» (Jueces 14, 18)

  • Por ahora, sigue durmiendo hasta mañana.» Antes de que amaneciera, cuando todavía no se puede distinguir bien a las personas, se levantó Booz, pues pensaba: «Nadie debe saber que esta mujer estuvo aquí durmiendo.» (Rut 3, 14)

  • Despidiéndose, ella dijo: «Ojalá merezca yo tu favor.» Y volviéndose por donde había venido, se sentó a la mesa y comió, y ya no tenía la misma cara de antes. (1 Samuel 1, 18)

  • así hacían con todos los israelitas que venían a Silo. Incluso antes de que se hubiera quemado la grasa, el sirviente del sacerdote venía y decía al que sacrificaba: «Dame la carne para asársela a su gusto al sacerdote, ya que no aceptará carne cocida, sino solamente carne cruda.» (1 Samuel 2, 15)


Jesus lhe quer bem, da maneira que só Ele sabe amar.” São Padre Pio de Pietrelcina