Encontrados 38 resultados para: Quemará

  • Aarón quemará cada mañana sobre él incienso aromático, al preparar las lámparas, (Exodo 30, 7)

  • Lavarán con agua las entrañas y las patas, y el sacerdote lo quemará todo en el altar. Así es el holocausto, y es un sacrificio por el fuego cuyo suave olor apacigua a Yavé. (Levítico 1, 9)

  • Lavarán con agua las entrañas y las patas y el sacerdote lo ofrecerá y lo quemará en el altar. Así es el holocausto, y es un sacrificio por el fuego cuyo suave olor apacigua a Yavé. (Levítico 1, 13)

  • El sacerdote presentará la víctima en el altar, le retorcerá la cabeza y la quemará sobre el altar; la sangre la exprimirá sobre la pared del altar. (Levítico 1, 15)

  • Se abrirá el ave entre las alas, sin partirla. El sacerdote la quemará en el altar encima de la leña colocada sobre el fuego. Así es el holocausto, y es un sacrificio por el fuego cuyo suave olor apacigua a Yavé.» (Levítico 1, 17)

  • La llevará a los hijos de Aarón, a los sacerdotes; el sacerdote tomará un puñado de harina con aceite y todo el incienso; luego lo quemará en el altar para que Dios se acuerde de aquel que ofrece. Es un sacrificio por el fuego de calmante aroma para Yavé. (Levítico 2, 2)

  • El sacerdote reservará parte de la ofrenda para que Dios se acuerde de aquel que ofrece, y la quemará en el altar: es un sacrificio por el fuego de calmante olor para Yavé. (Levítico 2, 9)

  • El sacerdote quemará en tu nombre parte del grano molido y del aceite, con todo el incienso. Es un sacrificio por el fuego para Yavé. (Levítico 2, 16)

  • El sacerdote quemará todo esto sobre el altar como sacrificio para Yavé. (Levítico 3, 11)

  • El sacerdote quemará todo esto en el altar, como alimento pasado por el fuego, de calmante olor para Yavé. (Levítico 3, 16)

  • Hará como se hace en los sacrificios de comunión: lo quemará sobre el altar de los holocaustos. (Levítico 4, 10)

  • Luego quitará toda la grasa y la quemará sobre el altar, (Levítico 4, 19)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina