Encontrados 217 resultados para: Gracias

  • Gracias sean dadas a Dios, que siempre nos lleva en el desfile victorioso de Cristo y que por nuestro ministerio difunde por todas partes su conocimiento cual fragancia de incienso. (2º Carta a los Corintios 2, 14)

  • Por eso nos sentimos seguros de Dios gracias a Cristo. (2º Carta a los Corintios 3, 4)

  • Y todo esto es para bien de ustedes; los favores de Dios se van multiplicando, y también se irá ampliando cada día más la acción de gracias que tantas personas rinden a Dios para gloria suya. (2º Carta a los Corintios 4, 15)

  • Den gracias a Dios que inspira a Tito el mismo interés por ustedes. (2º Carta a los Corintios 8, 16)

  • Sean ricos en todo, y den con generosidad, y nosotros lo transformaremos en acciones de gracias a Dios. (2º Carta a los Corintios 9, 11)

  • Pues este servicio de carácter sagrado, no sólo proporcionará a los hermanos lo que necesitan, sino que de él resultarán incontables acciones de gracias a Dios. (2º Carta a los Corintios 9, 12)

  • Este servicio será para ellos una prueba concreta: darán gracias a Dios porque ustedes son consecuentes con el evangelio de Cristo y saben compartir generosamente con ellos y con todos. (2º Carta a los Corintios 9, 13)

  • Sí, ¡gracias sean dadas a Dios por su don, que nadie sabría expresar! (2º Carta a los Corintios 9, 15)

  • No llegamos con grandes pretensiones adonde otros han trabajado. Al contrario, esperamos que mientras más crezca su fe, también crezcamos nosotros gracias a ustedes, según nuestra propia pauta. (2º Carta a los Corintios 10, 15)

  • Ustedes están en Cristo Jesús, y todos son hijos de Dios gracias a la fe. (Carta a los Gálatas 3, 26)

  • por lo que no dejo de dar gracias a Dios y de recordarlos en mis oraciones. (Carta a los Efesios 1, 16)

  • A lo mejor han sabido de las gracias que Dios me concedió para bien de ustedes. (Carta a los Efesios 3, 2)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina