Encontrados 1697 resultados para: Entonces

  • Entonces agregó: «El Dios de nuestros padres te ha elegido para que conozcas su voluntad, veas al Justo y oigas su propia voz. (Hecho de los Apóstoles 22, 14)

  • Entonces el comandante ordenó que lo metieran dentro de la fortaleza y lo azotaran, para que confesara por qué motivo gritaban de esa manera contra él. (Hecho de los Apóstoles 22, 24)

  • Pablo entonces le dijo: «Dios te golpeará a ti, pared blanqueada. Estás ahí sentado para juzgarme según la Ley, y tú violas la Ley ordenando que me golpeen.» (Hecho de los Apóstoles 23, 3)

  • La discusión se hizo tan violenta que el capitán tuvo miedo de que despedazaran a Pablo. Ordenó, entonces, que vinieran los soldados, sacaran a Pablo de allí y lo llevaran de nuevo a la fortaleza. (Hecho de los Apóstoles 23, 10)

  • Entonces Pablo llamó a un oficial y le dijo: «Lleva a este joven ante el comandante, pues tiene algo que contarle.» (Hecho de los Apóstoles 23, 17)

  • Entonces el gobernador dio la palabra a Pablo, que contestó: «Sé que has administrado esta nación durante muchos años, y esto me hace sentir muy confiado para exponer mi defensa. (Hecho de los Apóstoles 24, 10)

  • Pasaron así dos años. Entonces Felix fue reemplazado por Porcio Festo, y como quería quedar bien con los judíos, dejó a Pablo preso. (Hecho de los Apóstoles 24, 27)

  • Entonces Festo, que quería ganarse la amistad de los judíos, preguntó a Pablo: «Si soy yo el que te va a juzgar, ¿quieres subir a Jerusalén?» (Hecho de los Apóstoles 25, 9)

  • Entonces Festo, después de hablar con su consejo, decidió: «Has apelado al César; al César irás.» (Hecho de los Apóstoles 25, 12)

  • Pero Pablo apeló y pidió que el sumario lo hiciera el tribunal del emperador. Entonces ordené que lo mantuvieran bajo custodia hasta que pueda enviarlo al César.» (Hecho de los Apóstoles 25, 21)

  • Agripa dijo a Pablo: «Puedes hablar en tu defensa.» Entonces Pablo extendió su mano y empezó a hablar así: (Hecho de los Apóstoles 26, 1)

  • Entonces Pablo les dijo: «Amigos, yo veo que la travesía es muy arriesgada, y vamos a perder no sólo la carga y la nave, sino también nuestras vidas.» (Hecho de los Apóstoles 27, 10)


“Comunguemos com santo temor e com grande amor.” São Padre Pio de Pietrelcina