Encontrados 21 resultados para: �Durará

  • Harás, pues, con Aarón y sus hijos todo lo que te mando. La consagración durará siete días. (Exodo 29, 35)

  • La expiación por el altar, y luego su consagración durará siete días. En adelante el altar será cosa muy sagrada y todo cuanto toque el altar quedará consagrado. (Exodo 29, 37)

  • El tiempo de trilla alcanzará hasta la vendimia y la vendimia durará hasta la siembra; comerán su pan hasta saciarse y vivirán seguros en su tierra. (Levítico 26, 5)

  • Siete días durará esta fiesta en honor a Yavé, en el lugar elegido por él; pues Yavé te bendecirá en todas tus cosechas y en toda obra de tus manos, así que te darás todo a la alegría. (Deuteronomio 16, 15)

  • El rey me preguntó, estando la reina sentada a su lado: «¿Cuánto tiempo durará tu viaje? ¿Cuándo volverás?» Yo le dije un plazo y él me permitió salir. (Nehemías 2, 6)

  • Pero no se enriquecerá, su fortuna no durará; la sombra de su follaje no se extenderá sobre la tierra. (Job 15, 29)

  • Durará tanto tiempo como el sol, como la luna a lo largo de los siglos. (Salmos 72, 5)

  • ¿Hasta cuándo, Señor, durará tu cólera? ¿tus celos quemarán siempre como fuego? (Salmos 79, 5)

  • Su descendencia durará para siempre, su trono como el sol se mantendrá ante mí. (Salmos 89, 37)

  • Habrá en su casa bienes y riquezas, y su honradez, que durará para siempre. (Salmos 112, 3)

  • Mientras menos inteligente es un jefe, más opresor será: el que aborrece los abusos durará largo tiempo. (Proverbios 28, 16)

  • Su fortuna le durará, contarán en la asamblea sus obras generosas. (Sirácides (Eclesiástico) 31, 11)


“Pobres e desafortunadas as almas que se envolvem no turbilhão de preocupações deste mundo. Quanto mais amam o mundo, mais suas paixões crescem, mais queimam de desejos, mais se tornam incapazes de atingir seus objetivos. E vêm, então, as inquietações, as impaciências e terríveis sofrimentos profundos, pois seus corações não palpitam com a caridade e o amor. Rezemos por essas almas desafortunadas e miseráveis, para que Jesus, em Sua infinita misericórdia, possa perdoá-las e conduzi-las a Ele.” São Padre Pio de Pietrelcina