7. He sabido que estás esquilando. Acuérdate que en todo el tiempo que tus pastores estuvieron con nosotros no les hemos perjudicado en nada. Más aún, no les ha desaparecido nada durante todo el tiempo que estuvieron en Carmelo.





“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina