7. Supo que los judíos habían destruido el abominable ídolo erigido por él sobre el altar de Jerusalén y habían levantado nuevamente las murallas del Templo a la misma altura que las anteriores; además habían fortificado la ciudad de Betsur.





“Que Jesus o mergulhe no esplendor da Sua imortal juventude.” São Padre Pio de Pietrelcina