21. Pues como el Padre resucita a los muertos y los hace revivir, así también el hijo da la vida a los que quiere.





“É doce o viver e o penar para trazer benefícios aos irmãos e para tantas almas que, vertiginosamente, desejam se justificar no mal, a despeito do Bem Supremo.” São Padre Pio de Pietrelcina