24. No contento con esto, Antíoco envió al misarca Apolonio con un ejército de veintidós mil soldados, con orden de degollar a todos los de edad adulta y de vender las mujeres y los niños.





“Todas as pessoas que escolhem a melhor parte (viver em Cristo) devem passar pelas dores de Cristo; algumas mais, algumas menos…” São Padre Pio de Pietrelcina