Encontrados 11 resultados para: zafiro

  • y vieron al Dios de Israel. Bajo sus pies había como un pavimento de zafiro, semejante en claridad al mismo cielo. (Exodo 24, 10)

  • en la segunda, un rubí, un zafiro y un diamante; (Exodo 28, 18)

  • en la segunda, un rubí, un zafiro y un diamante; (Exodo 39, 11)

  • porque Jerusalén será de nuevo edificada, la ciudad que es morada para siempre. Bienaventurado seré si el resto de mi raza puede contemplar tu gloria y dar gracias al rey del cielo. Las puertas de Jerusalén serán construidas con zafiro y esmeraldas, y todas sus murallas con piedras preciosas. Las torres de Jerusalén serán reconstruidas con oro, y sus baluartes, con oro puro. Las plazas de Jerusalén serán pavimentadas con rubíes y con piedras de Ofir. (Tobías 13, 17)

  • Allí las piedras albergan el zafiro, que contiene partículas de oro. (Job 28, 6)

  • no se valora con el oro de Ofir, el ágata preciosa o el zafiro. (Job 28, 16)

  • Más que la nieve sus príncipes brillaban, eran más blancos que la leche; más rojo que el coral era su cuerpo, su aspecto era de zafiro. (Lamentaciones 4, 7)

  • Por encima del firmamento que se extendía sobre sus cabezas apareció como una piedra de zafiro en forma de trono; y sobre esta especie de trono, una figura de aspecto semejante al de un hombre, que se erguía sobre él. (Ezequiel 1, 26)

  • Miré y vi que sobre el firmamento que estaba encima de la cabeza de los querubines había como una piedra de zafiro, y sobre ellos aparecía algo así como un trono. (Ezequiel 10, 1)

  • En Edén, jardín de Dios, vivías. Innumerables piedras preciosas adornaban tu manto: rubí, topacio, diamante, crisólito, piedra de ónice, jaspe, zafiro, carbunclo y esmeralda; de oro era el borde de tu manto, de oro las incrustaduras, todo a punto desde el día en que fuiste creado. (Ezequiel 28, 13)

  • Los fundamentos del muro de la ciudad están adornados de toda clase de piedras preciosas: el primer fundamento es de jaspe; el segundo, de zafiro; el tercero, de calcedonia; el cuarto, de esmeralda; (Apocalipsis 21, 19)


“Os talentos de que fala o Evangelho são os cinco sentidos, a inteligência e a vontade. Quem tem mais talentos, tem maior dever de usá-los para o bem dos outros.” São Padre Pio de Pietrelcina