Encontrados 12 resultados para: pascual
no dejarán nada para la mañana siguiente ni romperán ninguno de sus huesos; se ajustarán en todo al rito pascual. (Números 9, 12)
Si los extranjeros residentes quieren celebrar la pascua en honor del Señor, se ajustarán en todo a la ley y rito pascual. No habrá entre vosotros más que una ley, la misma para extranjeros y nativos". (Números 9, 14)
Inmolarás como víctima pascual al Señor, tu Dios, ganado mayor y menor en el lugar elegido por él, para hacer habitar allí su nombre. (Deuteronomio 16, 2)
Inmolaron el cordero pascual el día catorce del segundo mes. Llenos de vergüenza, los sacerdotes y los levitas se purificaron y ofrecieron holocaustos en el templo del Señor. (II Crónicas 30, 15)
Un gran número de personas de Efraín, de Manasés, de Isacar y de Zabulón no se habían purificado, es decir, comieron la víctima pascual sin conformarse a lo prescrito, pero Ezequías oró por ellos así: "El Señor, que es bueno, perdone (II Crónicas 30, 18)
Josías celebró en Jerusalén la pascua en honor del Señor. Se inmoló el cordero pascual el día catorce del primer mes. (II Crónicas 35, 1)
Inmolad el cordero pascual, purificaos y preparad todo lo necesario para que vuestros hermanos puedan cumplir lo que el Señor mandó por medio de Moisés". (II Crónicas 35, 6)
Asaron al fuego el cordero pascual como está prescrito, cocieron las demás ofrendas sagradas en calderas, calderos y sartenes, y las distribuyeron luego diligentemente entre todo el pueblo. (II Crónicas 35, 13)
Los israelitas repatriados comieron el banquete pascual con todos aquellos que se habían separado de la impureza de los paganos del país y se habían unido a ellos para buscar al Señor, Dios de Israel. (Esdras 6, 21)
El primer día de la fiesta de los panes sin levadura, cuando se sacrificaba el cordero pascual, sus discípulos le preguntaron: "¿Dónde quieres que vayamos a preparar la cena de la pascua?". (Marcos 14, 12)
Llegó el día de los panes sin levadura, cuando había que sacrificar el cordero pascual, (Lucas 22, 7)
Echad fuera la vieja levadura para ser una masa nueva, puesto que sois panes sin levadura; porque Cristo, nuestro cordero pascual, ya ha sido inmolado. (I Corintios 5, 7)