Encontrados 42 resultados para: contar

  • Multiplicaré tu descendencia como el polvo de la tierra; si hay quien pueda contar el polvo de la tierra, ése podrá contar tu descendencia. (Génesis 13, 16)

  • Y añadió: "Multiplicaré tanto tu descendencia que no se la podrá contar". (Génesis 16, 10)

  • Al ver el anillo y los brazaletes que llevaba su hermana y al oírla contar todo lo que aquel hombre le había dicho, fue hasta él, pues estaba todavía con los camellos junto a la fuente, (Génesis 24, 30)

  • Tú me has dicho: Yo te haré el bien y haré tu descendencia como la arena del mar, tan numerosa que no se puede contar". (Génesis 32, 13)

  • Todas las personas de la familia de Jacob, que emigraron con él a Egipto, sin contar a sus nueras, eran en total sesenta y seis. (Génesis 46, 26)

  • Ésta es la ley del nazireo. Si además de su cabellera el nazireo ha hecho voto de una ofrenda personal al Señor (sin contar otras posibles ofrendas), cumplirá el voto hecho, además de lo que la ley tiene ya previsto para su cabellera". (Números 6, 21)

  • Las víctimas se elevaron a 14.700, sin contar los que habían muerto a causa de Coré. (Números 17, 14)

  • ¿Quién podría contar el polvo de Jacob? ¿Quién sería capaz de enumerar las miríadas de Israel? ¡Tenga yo la muerte de los justos! ¡Sea mi final como el suyo!". (Números 23, 10)

  • El botín capturado, sin contar lo que los soldados recogieron por su parte, sumaba 675.000 cabezas de ganado menor, (Números 31, 32)

  • ciudades todas fortificadas con altas murallas, con puertas y barras, sin contar muchas ciudades que no tenían murallas. (Deuteronomio 3, 5)

  • El peso de los anillos de oro que él había pedido ascendió a veinte kilos, sin contar las lunetas, los pendientes y los vestidos de púrpura que llevaban los reyes madianitas ni los collares que colgaban del cuello de sus camellos. (Jueces 8, 26)

  • Los benjaminitas, venidos de todas las ciudades, sumaron veinticinco mil hombres diestros en el manejo de la espada, sin contar los de Guibeá. (Jueces 20, 15)


“Que Nossa Mãe do Céu tenha piedade de nós e com um olhar maternal levante-nos, purifique-nos e eleve-nos a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina