Encontrados 12 resultados para: breve
es breve la alegría del malvado, su gozo es sólo de un instante? (Job 20, 5)
Acuérdate de que mi vida es breve, de que los hombres que creaste duran muy poco tiempo. (Salmos 89, 48)
No se daba cuenta Antíoco, lleno de orgullo, de que, por los pecados de los habitantes de la ciudad, y por breve tiempo, el Señor se había airado, y que por esta misma razón había sido profanado el templo. (II Macabeos 5, 17)
Y serían inducidos a error, por su hipocresía y por el amor de una breve y precaria existencia, y me acarrearía vergüenza y oprobio en mi vejez. (II Macabeos 6, 25)
Si el Señor, Dios vivo, se ha indignado contra nosotros por breve tiempo para castigarnos y corregirnos, él se reconciliará con sus siervos de nuevo. (II Macabeos 7, 33)
Mis hermanos están ya en posesión de una promesa de vida eterna por haber sufrido un breve tormento. En cambio, tú sufrirás las penas debidas a tu soberbia. (II Macabeos 7, 36)
Y así aquéllos, aunque estaban ansiosos de alimento, ante el aspecto repugnante de los animales que les enviaste, perdieron las ganas de comer; mientras que tu pueblo, después de una breve privación, gustó un manjar exquisito. (Sabiduría 16, 3)
Con el fin de que se corrigieran, y por breve tiempo, fueron atormentados, habiendo tenido un signo de salvación para que conservaran el recuerdo de los mandamientos de tu ley; (Sabiduría 16, 6)
Anúnciales: Esto dice el Señor Dios: Sí, yo los he alejado entre las naciones, los he dispersado por tierras extrañas; pero yo mismo he sido un santuario para ellos durante el breve tiempo en que están desterrados en estos países. (Ezequiel 11, 16)
Pues aunque os entristecí con la carta, no me arrepiento. Y si antes me pesó, viendo que aquella carta os entristeció, aunque por breve tiempo, (II Corintios 7, 8)
Nosotros, hermanos, en este breve espacio de tiempo que hemos estado separados de vosotros, aunque espiritualmente no lo hemos estado, hemos sentido un deseo todavía más vivo de volver a veros. (I Tesalonicenses 2, 17)
El Dios de toda gracia que os llamó en Cristo a su eterna gloria, él mismo os perfeccionará después de un breve padecer, os confirmará, os fortalecerá y os consolidará. (I Pedro 5, 10)