Encontrados 17 resultados para: arpas
Después llegarás a Guibeá de Dios, donde hay una guarnición de filisteos. Al entrar en la ciudad, te encontrarás con un grupo de profetas que bajan del alto, precedidos de arpas, tambores, flautas y cítaras, profetizando. (I Samuel 10, 5)
Al volver David de la guerra después de dar muerte al filisteo, las mujeres salían de todas las ciudades de Israel, cantando y danzando ante el rey Saúl al son de tambores y arpas y con gritos de alegría; (I Samuel 18, 6)
David y toda la casa de Israel iban delante del arca cantando y bailando con todas sus fuerzas al son de las cítaras, arpas, tambores, sistros y címbalos. (II Samuel 6, 5)
Con las maderas, el rey hizo balaustradas para el templo del Señor y para el palacio real, y cítaras y arpas para los cantores. Madera de sándalo como aquélla no se ha traído ni se ha vuelto a ver hasta nuestros días. (I Reyes 10, 12)
David y todo Israel iban delante cantando y bailando con todas sus fuerzas al son de las cítaras, arpas, tambores, címbalos y trompetas. (I Crónicas 13, 8)
David ordenó a los jefes de los levitas que dispusieran a sus hermanos los cantores con todos los instrumentos musicales de acompañamiento, arpas, cítaras y címbalos, e hicieron resonar bellas melodías en señal de regocijo. (I Crónicas 15, 16)
Zacarías, Uziel, Semiramot, Yejiel, Uní, Eliab, Maaseyas y Benayas tocaban arpas; (I Crónicas 15, 20)
David y los jefes del ejército seleccionaron también para el servicio a los hijos de Asaf, de Hemán y de Yedutún, profetas que se acompañaban de cítaras, arpas y címbalos. Se hizo el censo de estos hombres entregados a sus servicios. (I Crónicas 25, 1)
Todos cantaban bajo la dirección de su padre en el templo del Señor al son de címbalos, arpas y cítaras en servicio del templo de Dios, bajo las órdenes del rey: Asaf, Yedutún y Hemán. (I Crónicas 25, 6)
todos los levitas cantores, Asaf, Hemán y Yedutún, con sus hijos y hermanos, vestidos de lino, sonaban los címbalos, las arpas y cítaras, de pie al este del altar, con ciento veinte sacerdotes que los acompañaban tocando las trompetas. (II Crónicas 5, 12)
Con las maderas el rey hizo balaustradas para el templo del Señor y para el palacio real, y cítaras y arpas para los cantores. Nunca se había visto una madera igual en el reino de Judá. (II Crónicas 9, 11)
Entraron en Jerusalén y, al son de las arpas, cítaras y trompetas, se dirigieron al templo del Señor. (II Crónicas 20, 28)