24. Jehú había tendido su arco y le disparó a Joram una flecha que, entrando por la espalda, le atravesó el corazón. Y Joram cayó muerto en su carro.





“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina