7. Esto sucedió porque los hijos de Israel habían pecado contra Yavé, su Dios, que los había sacado de la tierra de Egipto, donde estaban sometidos a Faraón, y se habían vuelto hacia otros dioses.





“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraco com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina