11. Por eso envió en seguida un aviso a las ciudades de la costa, invitando a comprar esclavos judíos y prometiendo entregar noventa esclavos por talento, sin imaginarse el castigo que pronto le infligiría el Todopoderoso.





“Para mim, Deus está sempre fixo na minha mente e estampado no meu coração.” São Padre Pio de Pietrelcina