Znaleziono 385 Wyniki dla: servidor

  • Después añadió: "Tú no me has dado un descendiente, y un servidor de mi casa será mi heredero". (Génesis 15, 3)

  • diciendo: "Señor mío, si quieres hacerme un favor, te ruego que no pases de largo delante de tu servidor. (Génesis 18, 3)

  • Mientras tanto, iré a buscar un trozo de pan, para que ustedes reparen sus fuerzas antes de seguir adelante. ¡Por algo han pasado junto a su servidor!". Ellos respondieron: "Está bien. Puedes hacer lo que dijiste". (Génesis 18, 5)

  • les dijo: "Les ruego, señores, que vengan a pasar la noche en casa de este servidor. Lávense los pies, y mañana bien temprano podrán seguir viaje". "No, le respondieron ellos, pasaremos la noche en la plaza". (Génesis 19, 2)

  • Tú has sido bondadoso con tu servidor y me has demostrado tu gran misericordia, salvándome la vida. Pero yo no podré huir a las montañas, sin que antes caigan sobre mí la destrucción y la muerte. (Génesis 19, 19)

  • Entonces dijo al servidor más antiguo de su casa, el que le administraba todos los bienes: "Coloca tu mano debajo de mi muslo, (Génesis 24, 2)

  • El servidor le dijo: "Si la mujer no quiere venir conmigo a esta tierra, ¿debo hacer que tu hijo regrese al país de donde saliste?". (Génesis 24, 5)

  • El servidor puso su mano debajo del muslo de Abraham, su señor, y le prestó juramento respecto de lo que habían hablado. (Génesis 24, 9)

  • La joven a la que yo diga: ‘Por favor, inclina tu cántaro para que pueda beber’, y que me responda: ‘Toma, y también daré de beber a tus camellos’, esa será la mujer que has destinado para tu servidor Isaac. Así reconoceré que has sido bondadoso con mi patrón". (Génesis 24, 14)

  • el servidor corrió a su encuentro y le dijo: "Por favor, dame un trago de esa agua que llevas en el cántaro". (Génesis 24, 17)

  • Él continuó: "Yo soy servidor de Abraham. (Génesis 24, 34)

  • Cuando el servidor de Abraham oyó estas palabras, se postró en tierra delante del Señor. (Génesis 24, 52)


“Todas as graças que pedimos no nome de Jesus são concedidas pelo Pai eterno.” São Padre Pio de Pietrelcina