Znaleziono 244 Wyniki dla: aguas

  • En sus días fue excavado el depósito de las aguas, un estanque amplio como el mar. (Eclesiástico 50, 3)

  • Porque este pueblo rehusa las aguas de Siloé, que corren mansamente, y desfallece ante Resín y el hijo de Remalías, (Isaías 8, 6)

  • por eso, el Señor hace subir contra ellos las aguas torrenciales y caudalosas del Río -el rey de Asiria con toda su gloria-. Él rebasará todos sus cauces, desbordará por todas sus orillas, (Isaías 8, 7)

  • No se hará daño ni estragos en toda mi Montaña santa, porque el conocimiento del Señor llenará la tierra como las aguas cubren el mar. (Isaías 11, 9)

  • Porque las aguas de Nimrím son una desolación: el pasto está seco, la hierba consumida, ya no existe el verdor. (Isaías 15, 6)

  • porque las aguas de Dimón están llenas de sangre. Pero yo añadiré a las desgracias de Dimón un león para los fugitivos de Moab, para el resto de Admá. (Isaías 15, 9)

  • ¡Ah, ese rugido de pueblos numerosos, que rugen como rugen los mares! ¡Ese bramido de naciones, que braman como las aguas encrespadas! (Isaías 17, 12)

  • que envías emisarios por mar, en canoas de junco, sobre las aguas! Vayan, mensajeros veloces, a una nación esbelta, de tez bronceada, a un pueblo temible de cerca y de lejos, a una nación vigorosa y dominadora, cuyo país está surcado de ríos. (Isaías 18, 2)

  • Las aguas del mar se secarán y el Río quedará árido y reseco; (Isaías 19, 5)

  • Gemirán los pescadores, los que arrojan el anzuelo en el Nilo estarán de duelo, y desfallecerán los que echan la red sobre las aguas. (Isaías 19, 8)

  • hicieron un depósito entre los dos muros para las aguas de la cisterna antigua. ¡Pero no se fijaron en el que hacía todo eso, ni miraron al que lo planeó hace mucho tiempo! (Isaías 22, 11)

  • por las aguas profundas! El grano de Sijor, las cosechas del Nilo, le aportaban ganancias: ¡ella era el emporio de las naciones! (Isaías 23, 3)


“Imitemos o coração de Jesus, especialmente na dor, e assim nos conformaremos cada vez mais e mais com este coração divino para que, um dia, lá em cima no Céu, também nós possamos glorificar o Pai celeste ao lado daquele que tanto sofreu”. São Padre Pio de Pietrelcina