Znaleziono 102 Wyniki dla: Daniel

  • Dios concedió a estos cuatro jóvenes ciencia e inteligencia en todo lo referente a la literatura y la sabiduría, y Daniel podía entender visiones y sueños de toda índole. (Daniel 1, 17)

  • El rey conversó con ellos, y entre todos no se encontró ningún otro como Daniel, Ananías, Misael y Azarías. Ellos permanecieron al servicio del rey, (Daniel 1, 19)

  • Así continuó Daniel hasta el primer año del rey Ciro. (Daniel 1, 21)

  • Se promulgó el decreto de hacer morir a los sabios, y también se buscó a Daniel y a sus compañeros para darles muerte. (Daniel 2, 13)

  • Entonces Daniel se dirigió con cautela y discreción a Arioc, capitán de guardias del rey, que había salido para matar a los sabios de Babilonia. (Daniel 2, 14)

  • Él tomó la palabra y dijo a Arioc, comandante del rey: "¿Por qué este decreto tan perentorio de parte del rey?". Arioc informó del asunto a Daniel, (Daniel 2, 15)

  • Daniel se fue a su casa e informó del asunto a Ananías, Misael y Azarías, sus compañeros, (Daniel 2, 17)

  • Entonces el misterio fue revelado a Daniel en una visión nocturna, y él bendijo al Dios del cielo. (Daniel 2, 19)

  • Daniel tomó la palabra y exclamó: "Bendito sea el nombre de Dios, desde siempre y para siempre, porque a él pertenecen la sabiduría y la fuerza. (Daniel 2, 20)

  • A causa de esto, Daniel se presentó a Arioc, a quien el rey había encargado ejecutar a los sabios de Babilonia, y le habló de esta manera: "No hagas morir a los sabios de Babilonia. Llévame ante la presencia del rey, y yo le expondré la interpretación". (Daniel 2, 24)

  • Arioc llevó rápidamente a Daniel ante la presencia del rey, y le dijo: "He hallado entre los deportados de Judá a un hombre que hará conocer al rey la interpretación". (Daniel 2, 25)

  • El rey tomó la palabra y dijo a Daniel, llamado Beltsasar: "¿Eres tú capaz de darme a conocer el sueño que tuve y su interpretación?". (Daniel 2, 26)


“Os corações fortes e generosos não se lamentam, a não ser por grandes motivos e,ainda assim,não permitem que tais motivos penetrem fundo no seu íntimo.(P.e Pio) São Padre Pio de Pietrelcina