Znaleziono 584 Wyniki dla: nuestro

  • nuestros hijos, nuestras mujeres, nuestros rebaños y todo nuestro ganado se quedarán aquí, en las ciudades de Galaad, (Números 32, 26)

  • «Yavé te mandó que dieras la tierra en herencia por suertes a los hijos de Israel y recibiste orden de Yavé de dar la herencia de Selofjad, nuestro hermano, a sus hijas. (Números 36, 2)

  • «Yavé, nuestro Dios, nos habló así en el monte Horeb: Ustedes han demorado bastante tiempo en esta montaña. (Deuteronomio 1, 6)

  • Entonces les dije: 'Hemos llegado a esta montaña del amorreo, que Yavé, nuestro Dios, nos da. (Deuteronomio 1, 20)

  • 'No teman ni tengan miedo de ellos. Yavé, nuestro Dios, que los conduce a ustedes, peleará por ustedes como ya lo hizo en Egipto (Deuteronomio 1, 30)

  • Pero ni aun así creyeron a Yavé, nuestro Dios. (Deuteronomio 1, 32)

  • Ustedes me respondieron: Hemos pecado contra Yavé, nuestro Dios. Iremos y combatiremos como él nos ha ordenado. Y tomaron cada uno sus armas y les pareció fácil escalar los cerros. (Deuteronomio 1, 41)

  • Piensen que Yavé nos ha bendecido en todas nuestras obras; él había previsto nuestro camino por el desierto y hace ya cuarenta años que Yavé está con ustedes, sin que nada les haya faltado . (Deuteronomio 2, 7)

  • y déjanos pasar tan sólo como lo hicieron los hijos de Esaú que habitan en Seír y los moabitas que moran en Ar, hasta que lleguemos al Jordán y entremos en la tierra que nos da Yavé, nuestro Dios . (Deuteronomio 2, 29)

  • Pero Sijón, rey de Jesbón, no quiso dejarnos pasar por allí, pues aquel día Yavé, nuestro Dios, quiso que se pusiera duro y cerrado, para que así cayera en nuestras manos. (Deuteronomio 2, 30)

  • y Yavé, nuestro Dios, nos lo entregó y lo derrotamos junto con sus hijos y toda su gente. (Deuteronomio 2, 33)

  • Desde Aroer, ciudad situada sobre la pendiente del torrente Arnón, y la ciudad que está abajo, hasta Galaad, no hubo aldea ni ciudad que no tomáramos: Yavé, nuestro Dios, nos las entregó todas. (Deuteronomio 2, 36)


Por que a tentação passada deixa na alma uma certa perturbação? perguntou um penitente a Padre Pio. Ele respondeu: “Você já presenciou um tremor de terra? Quando tudo estremece a sua volta, você também é sacudido; no entanto, não necessariamente fica enterrado nos destroços!” São Padre Pio de Pietrelcina