19. El sacerdote untará en la sangre de la víctima por el pecado y rociará los montantes de la puerta de la Casa, los cuatro ángulos del zócalo del altar y los montantes de las puertas del patio interior.





“Quando ofendemos a justiça de Deus, apelamos à Sua misericórdia. Mas se ofendemos a Sua misericórdia, a quem podemos apelar? Ofender o Pai que nos ama e insultar quem nos auxilia é um pecado pelo qual seremos severamente julgados.” São Padre Pio de Pietrelcina