Salmos, 24
4. El hombre de manos inocentes y limpio corazón, que no entrega su alma a la mentira y nunca jura en falso.
4. El hombre de manos inocentes y limpio corazón, que no entrega su alma a la mentira y nunca jura en falso.
“Não se aflija a ponto de perder a paz interior. Reze com perseverança, com confiança, com calma e serenidade.” São Padre Pio de Pietrelcina