5. Entregó a su doncella una bota de vino y un tarro de aceite, llenó las alforjas con panes de cebada, tortas de higos y panes rituales; lo envolvió todo y se lo entregó.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina