Fondare 90 Risultati per: estamos

  • Y se decían unos a otros: "Verdaderamente estamos pagando lo que hicimos con nuestro hermano. Lleno de angustia nos pedía clemencia, y no le hicimos caso. Por eso nos ha venido esta desgracia". (Génesis 42, 21)

  • Ciertamente vosotros os portasteis mal conmigo, pero Dios lo cambió en bien, para hacer lo que hoy estamos viendo, para mantener en vida a un gran pueblo. (Génesis 50, 20)

  • y les dijeron: "Estamos impuros por haber tocado un cadáver; ¿por qué no vamos a presentar la ofrenda al Señor con los demás israelitas?". (Números 9, 7)

  • Los israelitas dijeron a Moisés: "¡Estamos perdidos! ¡Muertos somos! ¡Muertos todos! (Números 17, 27)

  • Clamamos al Señor, que oyó nuestra voz y envió un ángel, que nos sacó de Egipto. Y aquí estamos ahora en Cades, ciudad que se encuentra en los confines de tus dominios. (Números 20, 16)

  • que murmuraba contra el Señor y Moisés, diciendo: "¿Por qué nos sacasteis de Egipto, para hacernos morir en el desierto? No hay pan ni agua, y estamos ya hartos de esta comida miserable". (Números 21, 5)

  • y les dijo: "Yo sé que el Señor os ha dado esta tierra; nosotros estamos llenos de miedo, y todos los habitantes de la región tiemblan ante vosotros, (Josué 2, 9)

  • Y ahora estamos en tus manos; haz de nosotros lo que te parezca bueno y justo". (Josué 9, 25)

  • Tres mil hombres de Judá fueron a la cueva de Etán para decir a Sansón: "¿No sabes que estamos bajo el dominio de los filisteos? ¿Qué es lo que has hecho?". Él les respondió: "Los he tratado como ellos me trataron a mí". (Jueces 15, 11)

  • Ellos le dijeron: "Consulta a Dios si tendrá éxito el viaje que estamos haciendo". (Jueces 18, 5)

  • ¿No estamos en el tiempo de la siega del trigo? Pues bien, voy a invocar al Señor y él mandará truenos y lluvia, para que sepáis y veáis el gran mal que le habéis hecho a los ojos del Señor al pedir para vosotros un rey". (I Samuel 12, 17)

  • Ellos contestaron: "Estamos a tus órdenes, haremos lo que mandes", (II Samuel 15, 15)


“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina