Fondare 75 Risultati per: ambos

  • Estaban ambos desnudos, el hombre y su mujer, pero no se avergonzaban uno del otro. (Génesis 2, 25)

  • Por eso se llamó a aquel lugar Berseba, porque allí juraron ambos. (Génesis 21, 31)

  • Aconteció que ambos soñaron sendos sueños en una misma noche, cada cual con su sentido propio: el escanciador y el panadero del rey de Egipto que estaban detenidos en la prisión. (Génesis 40, 5)

  • Moisés salió al encuentro de su suegro, se postró y le besó. Se saludaron ambos y entraron en la tienda. (Exodo 18, 7)

  • En todo caso delictivo, ya se trate de buey, asno, oveja, ropa o de cualquier cosa desaparecida, de la que uno diga: «Es esto», la causa de ambos se llevará ante Dios; y aquel a quien Dios declare culpable, restituirá el doble a su prójimo. (Exodo 22, 8)

  • Lo que excede en longitud de las piezas de la Tienda - un codo por cada lado - se extenderá a ambos lados de la Morada, a un lado y a otro, para cubrirla. (Exodo 26, 13)

  • Para transportar el altar, se pasarán estos varales por las anillas de ambos lados del altar. (Exodo 27, 7)

  • y debajo de la moldura, a los costados, harás dos anillas. Las harás a ambos lados, para meter por ellas los varales con que transportarlo. (Exodo 30, 4)

  • Volvióse Moisés y bajó del monte, con las dos tablas del Testimonio en su mano, tablas escritas por ambos lados; por una y otra cara estaban escritas. (Exodo 32, 15)

  • y por el otro lado - a ambos lados de la entrada del atrio - había un cortinaje de quince codos; sus postes eran tres, y tres sus basas. (Exodo 38, 15)

  • Dijo a Aarón: «Trae un becerro para el sacrificio por el pecado y un carnero para el holocausto, ambos sin defecto, para ofrecerlos ante Yahveh. (Levítico 9, 2)

  • Hablarás a los israelitas, diciendo: "Tomad un macho cabrío para el sacrificio por el pecado y un becerro y un cordero, ambos de un año y sin defecto, para el holocausto; (Levítico 9, 3)


“Não abandone sua alma à tentação, diz o Espírito Santo, já que a alegria do coração é a vida da alma e uma fonte inexaurível de santidade.” São Padre Pio de Pietrelcina