Fondare 13 Risultati per: semillas

  • La tierra produjo hortalizas, plantas que dan semillas y árboles frutales que dan fruto con su semilla dentro, cada uno según su especie. Dios vio que esto era bueno. (Génesis 1, 12)

  • Dijo Dios: «Hoy les entrego para que se alimenten toda clase de plantas con semillas que hay sobre la tierra, y toda clase de árboles frutales. (Génesis 1, 29)

  • Entonces José dijo al pueblo: «Ya ven que los he comprado a ustedes y sus tierras para Faraón. Aquí tienen semillas: siembren la tierra. (Génesis 47, 23)

  • Cuando llegue el tiempo de la cosecha, darán la quinta parte a Faraón y las otras cuatro partes restantes serán para ustedes, como semillas de siembra, y como alimento para ustedes, su familia y los que estén en su casa.» (Génesis 47, 24)

  • Si alguno de esos cadáveres cae sobre semillas que han de sembrarse, quedarán puras; (Levítico 11, 37)

  • El diezmo entero de la tierra, tanto de las semillas como de los frutos de los árboles, es de Yavé, es cosa sagrada para él; (Levítico 27, 30)

  • El Señor te dará la lluvia para las semillas que hayas sembrado en el campo, y el pan que te producirá la tierra será sustancioso y nutritivo. Tu ganado pastará entonces en grandes potreros. (Isaías 30, 23)

  • Pues así como brotan de la tierra las semillas o como aparecen las plantitas en el jardín, así el Señor Yavé hará brotar la justicia y la alabanza a la vista de todas las naciones. (Isaías 61, 11)

  • Es la más pequeña de las semillas, pero cuando crece, se hace más grande que las plantas de huerto. Es como un árbol, de modo que las aves vienen a posarse en sus ramas.» (Evangelio según San Mateo 13, 32)

  • Otra parte cayó entre piedras, donde había poca tierra, y las semillas brotaron en seguida por no estar muy honda la tierra. (Evangelio según San Marcos 4, 5)

  • Otras semillas cayeron entre espinos: los espinos crecieron y las sofocaron, de manera que no dieron fruto. (Evangelio según San Marcos 4, 7)

  • Otras semillas cayeron en tierra buena: brotaron, crecieron y produjeron unas treinta, otras sesenta y otras cien. (Evangelio según San Marcos 4, 8)


“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina