Salmos, 84
9. ¡Oh Señor, Dios Sabaot, escucha mi plegaria, oye con atención, Dios de Jacob!
9. ¡Oh Señor, Dios Sabaot, escucha mi plegaria, oye con atención, Dios de Jacob!
“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina