Talált 51 Eredmények: sagrado

  • Después tomarás el carnero ofrecido para la investidura y harás cocinar su carne en el recinto sagrado. (Exodo 29, 31)

  • Observarán el sábado, porque es sagrado para ustedes. El que lo profane, será castigado con la muerte. Sí, todo el que haga algún trabajo ese día será excluido de su pueblo. (Exodo 31, 14)

  • Así reparará el derecho sagrado contra el que pecó, añadiendo un quinto más, que entregará al sacerdote. Este practicará el rito de expiación en favor de esa persona, con el carnero del sacrificio de reparación, y así será perdonada. (Levítico 5, 16)

  • Aarón y sus hijos comerán el resto. Lo comerán sin levadura, en el recinto sagrado, o sea, en el atrio de la Carpa del Encuentro. (Levítico 6, 9)

  • El sacerdote que la ofrezca como sacrificio por el pecado, comerá de ella. Tendrá que ser comida en el recinto sagrado, o sea, en el atrio de la Carpa del Encuentro. (Levítico 6, 19)

  • Todo cuanto toque la carne de la víctima quedará santificado; y si la sangre salpica alguna vestidura, tendrás que lavar en el recinto sagrado la parte salpicada. (Levítico 6, 20)

  • Sólo podrán comer de ella los varones de la familia sacerdotal, y tendrá que ser comida en el recinto sagrado: es una cosa santísima. (Levítico 7, 6)

  • Así ustedes podrán discernir lo sagrado de lo profano y lo puro de lo impuro, (Levítico 10, 10)

  • La comerán en el recinto sagrado, porque esa es la porción de las ofrendas que se queman para el Señor, sobre la que tienen derecho tú y tus hijos, conforme a la orden que recibí. (Levítico 10, 13)

  • "¿Por qué no comieron la víctima del sacrificio por el pecado en el recinto sagrado, ya que se trata de una cosa santísima, que el Señor les dio para borrar el pecado de la comunidad, practicando el rito de expiación en favor de ella, delante del Señor? (Levítico 10, 17)

  • Supuesto que su sangre no fue llevada al interior del Santuario, tendrían que haberla comido en el recinto sagrado, como yo lo ordené". (Levítico 10, 18)

  • Inmolará el cordero en el lugar sagrado donde se inmolan las víctimas del sacrificio por el pecado y del holocausto. Y esta víctima de reparación, como la del sacrificio por el pecado, será para el sacerdote: es una cosa santísima. (Levítico 14, 13)


“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina