Talált 17 Eredmények: guardián

  • Entonces el Señor preguntó a Caín: "¿Dónde está tu hermano Abel?". "No lo sé", respondió Caín. "¿Acaso yo soy el guardián de mi hermano?". (Génesis 4, 9)

  • David se levantó de madrugada, dejó el rebaño al cuidado de un guardián y partió con su carga, como se lo había mandado Jesé. Cuando llegó al cerco del campamento, el ejército avanzaba en orden de batalla, lanzando el grito de guerra. (I Samuel 17, 20)

  • El levita Coré, hijo de Imná, guardián de la puerta de Oriente, estaba encargado de las ofrendas voluntarias hechas a Dios, para administrar las ofrendas del Señor y los dones santísimos. (II Crónicas 31, 14)

  • Después de ellos trabajó Sadoc, hijo de Imer, enfrente de su casa, y a continuación Semaías, hijo de Secanías, guardián de la puerta Oriental. (Nehemías 3, 29)

  • Si pequé, ¿qué daño te hice, a ti, guardián de los hombres? ¿Por qué me has tomado como blanco y me he convertido en una carga para ti? (Job 7, 20)

  • Se edificó una casa como la araña, como la choza que hace un guardián. (Job 27, 18)

  • Él no dejará que resbale tu pie: ¡tu guardián no duerme! (Salmos 121, 3)

  • No, no duerme ni dormita él guardián de Israel. (Salmos 121, 4)

  • El Señor es tu guardián, es la sombra protectora a tu derecha: (Salmos 121, 5)

  • Coloca, Señor, un guardián en mi boca y un centinela a la puerta de mis labios; (Salmos 141, 3)

  • Por eso te daré gracias y te alabaré, y bendeciré el nombre del Señor. Canto de acción de gracias Den gracias al Guardián de Israel, porque es eterno su amor. Den gracias al Creador del universo, porque es eterno su amor. Den gracias al Redentor de Israel, porque es eterno su amor. Den gracias al que congrega a los dispersos de Israel, porque es eterno su amor. Den gracias al que construye su Ciudad y su Santuario, porque es eterno su amor. Den gracias al que hace florecer el poderío de la casa de David, porque es eterno su amor. Den gracias al que eligió como sacerdotes a los hijos de Sadoc, porque es eterno su amor. Den gracias al Escudo de Abraham, porque es eterno su amor. Den gracias a la Roca de Isaac, porque es eterno su amor. Den gracias al Fuerte de Jacob, porque es eterno su amor. Den gracias al que eligió a Sión, porque es eterno su amor. Den gracias al Rey de todos los reyes, porque es eterno su amor. Él exaltará el poder de su pueblo, para que lo alaben todos sus fieles, los hijos de Israel, el pueblo que está cerca de él. ¡Aleluya! (Eclesiástico 51, 12)

  • Yo, el Señor, soy su guardián, la riego constantemente; para que nadie le haga daño, la cuido día y noche. (Isaías 27, 3)


“Quando Jesus vem a nós na santa comunhão, encontra alegria em Sua criatura. Por nossa parte, procuremos Nele a nossa alegria.” São Padre Pio de Pietrelcina