26. Al día siguiente vio a dos israelitas que se estaban peleando y trató de pacificarlos diciéndoles: "Ustedes son hermanos, ¿por qué se hacen daño el uno al otro?"





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina