11. y un macho cabrío, como sacrificio por el pecado de la fiesta de la Expiación, del holocausto perpetuo, de su oblación y sus libaciones.





“Padre Pio disse a um filho espiritual: Trabalhe! Ele perguntou: No que devo trabalhar, Padre? Ele respondeu: Em amar sempre mais a Jesus!” São Padre Pio de Pietrelcina