35. Todo el pueblo trató de obligar a David a que comiera algo cuando aún era de día, pero David pronunció este juramento: "¡Que Dios me castigue una y otra vez, si llego a probar pan o cualquier otro bocado antes de la puesta del sol!".





“Devo fazer somente a vontade de Deus e, se lhe agrado, o restante não conta.” São Padre Pio de Pietrelcina