pronađen 13 Rezultati za: perecido

  • Dijeron los israelitas a Moisés: «¡Estamos perdidos! ¡Hemos perecido! ¡Todos hemos perecido! (Números 17, 27)

  • El pueblo protestó contra Moisés, diciéndole: «Ojalá hubiéramos perecido igual que perecieron nuestros hermanos delante de Yahveh. (Números 20, 3)

  • Su posteridad ha perecido, desde Jesbón hasta Dibón, y hemos dado fuego desde Nofaj hasta Mádaba. (Números 21, 30)

  • Uno de los oficiales respondió y dijo: «Que se tomen cinco de los caballos restantes, pues les va a pasar lo que a toda la muchedumbre de Israel que ha perecido; y enviémosles para ver.» (II Reyes 7, 13)

  • ¡Recuerda! ¿Qué inocente jamás ha perecido? ¿dónde han sido los justos extirpados? (Job 4, 7)

  • Si tu ley no hubiera sido mi delicia, ya habría perecido en mi miseria. (Salmos 119, 92)

  • todos nuestros hermanos que vivían en el país de Tubías han sido muertos, llevados cautivos sus mujeres, hijos y bienes, y han perecido allí unos mil hombres.» (I Macabeos 5, 13)

  • Los de la Ciudadela de Jerusalén se veían imposibilitados de entrar y salir por la región, de comprar y de vender. Sufrían grave escasez y bastantes de ellos habían perecido de hambre. (I Macabeos 13, 49)

  • Pero adelantándose uno, anunció a Juan en Gázara que su padre y sus hermanos había perecido y añadió: «Ha enviado gente a matarte a ti también.» (I Macabeos 16, 21)

  • Oráculo sobre Moab. Porque de noche ha sido saqueada, Ar Moab ha perecido Porque de noche ha sido saqueada, Quir Moab ha perecido. (Isaías 15, 1)

  • Entonces les dirás: Esta es la nación que no ha escuchado la voz de Yahveh su Dios, ni ha querido aprender. Ha perecido la lealtad, ha desaparecido de su boca. (Jeremías 7, 28)

  • Y ahora, ¿por qué clamas? ¿es que no hay rey en ti? ¿Ha perecido tu consejero, que un espasmo te atenaza cual de mujer en parto? (Miqueas 4, 9)


“O sábio elogia a mulher forte dizendo: os seu dedos manejaram o fuso. A roca é o alvo dos seus desejos. Fie, portanto, cada dia um pouco. Puxe fio a fio até a execução e, infalivelmente, você chegará ao fim. Mas não tenha pressa, pois senão você poderá misturar o fio com os nós e embaraçar tudo.” São Padre Pio de Pietrelcina