1. Al tercer día, cuando David y sus hombres llegaron a Siquelag, los amalecitas habían incursionado por el Négueb y contra Siquelag. Habían arrasado y prendido fuego a Siquelag,





“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina